jueves, 2 de octubre de 2008

La noche de los cristales fucsia

Nada se asemeja más a la bondad. La noche es un manto de ansiedad, de búsqueda, de más ansiedad. El cielo está pintado de colores. Las luces son de la ciudad, de los autos, de los seres que deambulan por las calles. De los seres que buscan. Todo esto al final de la avenida. Aquí adentro todo va lento, todo va nadando entre las lágrimas más hermosas que el Universo pudo concebir.